Inmejorable ubicación, todo se puede hacer a pie o en transporte público cercano, a pasos del famoso e impresionante river walk y sus skyscrapers con particularidades arquitectónicas.
Para el shopping excelente, ubicado en Magnificent Mile con Nordstrom, Macys, Saks & Bloomingdale’s cercanos. Y un sin fin de boutiques a lo largo de la avenida.
Por la mañana indiscutible visitar el Starbuckus más grande del mundo, un roaster de 5 pisos y uno dedicado a cocktail con café. La panadería italoamericana que ofrecen deliciosa pero no apto para diabéticos:)
Gastronomía de gran nivel tanto en restaurantes como en food trucks para comer un hotdog al estilo Chicago en Millenium Park cerca del “BEAN”
Imperdible la Chicagoan deep dish pizza en Labriola’s con un buen Chianti
Me gustó la historia del hotel que era un club de atletas a inicio de s.XX y las alas ubicadas por logias y órdenes del rey Arturo, del reino español y así en la torre ejecutiva. Lástima que no me hospedaron ahí. Una alberca fabulosa. Me pasaron del piso 22 al 25 pero la vista no era hacía la Michigan Ave. sino parcial a la calle.
El área donde me hospedaron tiene alfombras viejas y de mal olor; la ropa de cama muy bien y limpia pero con colchones que se hunden y eso fue malo.
Nunca sacuden las habitaciones hay mucho polvo en zonas como la cafetera y las persianas de rollo. Lo que se agradece es que todos los días hubo housekeeping.