Disfrute mi estancia, el hotel es muy agradable, las habitaciones son amplias, o al menos la Suite Master lo es, el equipo de aire acondicionado enfría a la perfección y es de la capacidad adecuada para mantener fresco todo el ambiente. Te dan la opción de cambiar o no tus toallas, y aunque las dejaba colgadas para reusarlas, siempre las cambiaron, lo cual no creo necesario.
Los espacios comunes son adecuados, y si bien el hotel no estaba lleno, las áreas de la alberca o los camastros de playa, no se encontraron en ningún momento sobreocupados. El estado de mantenimiento general es bueno, y sus medidas sanitarias adecuadas, el personal del hotel usa cubrebocas todo el tiempo, procuran sana distancia en mesas y camastros, y te ofrecen una bolsita con cubrebocas y gel antibacterial en la habitación.
El hotel ofrece espacio para estacionamiento, y servicio de restaurant, que en general me pareció bueno, está ubicado a nivel de playa en un espacio semiabierto cubierto por una velaria, el personal es amable y atento en el servicio, cuando hay un poco de viento, el lugar es fresco, pero si el aire está estático, llega a ser bochornoso en esta época del año, la comida, aunque en lo general fue buena, me pareció en relación calidad/sabor/precio poco sobresaliente, comparando con otros lugares de la zona.
Me abría gustado que ofrecieran un kit de sales de baño, o al menos lo tuvieran en venta, ayudaría mucho con la experiencia de la tina de hidromasaje de la terraza.