La estancia en el hotel fue maravillosa, es un hotel 100% familiar, las habitaciones son cómodas, el hotel es hermoso, con los animales andando por el complejo le dan un toca único. Las albercas son amplias, aunque para mi gusto muy ondas. La comida estuvo rica siempre y los restaurantes de especialidades ni qué decir, todo estuvo riquísimo, el personal amable, las recepcionistas (Coni y todas) súper amables. los meseros todos todos gentiles, y el equipo de animación también, regresaría sin dudarlo.