Gran hotel con cosas a mejorar, especialmente las siguientes:
1. Es imposible reservar en los restaurantes del hotel porque a las 8 de la mañana ya hay cola para ello y aunque madrugues y vayas a esa hora se llenan. Me sorprende ver en comentarios de años pasados que pasaba esto también, eso quiere decir que es un problema recurrente que no se ha solucionado.
2. A pesar de haber muchas hamacas siempre estan reservadas por toallas, sin la persona en cuestión en ellas y te cuesta encontrar libres.
3. En el buffet te sirven ellos por lo que se forman grandes colas, creo que se debería de aumentar el personal.
4. En la habitación teníamos un sillón que cuando la habitación es triple se usa de sofa cama, que nos imposibilitaba el uso del armario, por lo que estaría bien que si la habitación va a ser usada solo por dos personas, lo quitaran.
5. Las bebidas de la piscina del palace malisimas. Menos mal que encontramos en la piscina del white island a Patrick que nos hizo las mejores bebidas de nuestra estancia.
Por lo demás es un buen hotel, con variedad de comida especialmente en el desayuno y con personal por lo general muy amable, destacando sobre todo la profesionalidad y amabilidad de Tanit Merino en el guest service y de Patrick Cardona en el bar de la piscina del white island.