El hotel cumplía con todo lo necesario para una gran estadía en Sao Paulo, muy cómodo, limpio (a primera vista), excelente desayuno, gran ubicación, muy buen servicio. Sin embargo, tuve que pedir cambio de habitación ya que las 2 primeras noches maté cerca de 5 pulgas que me estaban picando, lo cual me decepcionó bastante. La atención del personal fue rápida y me cambiaron a una habitación mejor, pero las pulgas bajaron totalmente el nivel de mi experiencia en un hotel que parecía ser perfecto.