Los costos por fin de año fueron excesivos para una habitación húmeda y fria, parecía bodega pues tenía dos TV, una de ellas arrumbada en un mesa pues no servía. A pesar de la amabilidad de la encargada, el joven de la noche es muy parco, no llega el internet a las habitaciones y sólo tienen 3 lugares de estacionamiento, si están ocupados tienes que ir a un estacionamiento más adelante que cierra a las 10. Nos cambiaron de habitación pero terrible la regadera con 4 miserables chorros de agua.... ni aunque me dieran la estancia gratis regresaría... en una habitación el techo es de madera y se escuchaba el ruido de los pasos de la habitación de arriba muy fuerte, y en la otra se escuchaban todos los gemidos de placer de otra habitación... así que mejor reserva con anticipación otro lugar y no caigas aquí!