Es un hotel cómodo, con personal muy amable y eficiente. El desayuno buffet es bueno, pero debí incluirlo con la reserva, porque comprarlo aparte es un poco caro. En la zona cercana al hotel predomina la comunidad filipina. Hay muchas opciones para comer, y muchos comercios, incluyendo un supermercado. Un consejo: desde el aeropuerto insistan en tomar un taxi regular. Las limusinas cuestan más del doble.