Visita Juneau, en el sureste de Alaska, para conocer impresionantes formaciones naturales, senderos montañosos que atraviesan bosques y un campo de hielo de 3,900 kilómetros cuadrados (1,500 millas cuadradas).
De todos los increíbles paisajes en Juneau y sus alrededores, los mejores son los numerosos glaciares. Uno de los más impresionantes es el glaciar Mendenhall, a tan solo 19 kilómetros (12 millas) del centro de Juneau. Viaja en coche hasta el Centro de Visitantes del Glaciar Mendenhall, donde podrás ver excelentes panorámicas del glaciar, así como programas educativos para niños y adultos.
Desde el centro de visitantes puedes tomar uno de los senderos para ver salmones y osos, o puedes caminar por el East Glacier Loop (el circuito oriental del glaciar). Otra opción es el sendero Nugget Falls Trail de 1.6 kilómetros (1 milla) de longitud, que te lleva hasta la base de las grandes cataratas Nugget.
Para observar los glaciares aún más de cerca, toma uno de los cruceros diarios que te llevan por el fiordo Tracy Arm hasta el glaciar South Sawyer. Mira a las focas descansando sobre el hielo que flota por toda la zona.
Viaja en helicóptero hasta el Juneau Ice Field (campo de hielo de Juneau), al norte del pueblo. Esta área de hielo sólido de 3,900 kilómetros cuadrados (1,500 millas cuadradas) abarca valles completos. Camina por la gruesa capa helada de la llanura en compañía de un guía y asómate a las profundas grietas en el hielo.
Sube a bordo de un barco de observación de ballenas para ver más de la fauna de la zona. De abril a noviembre, alrededor de 600 ballenas jorobadas viven en el pasaje interior. Mantente alerta para ver a las orcas que vienen a cazar focas.
Puedes llegar a Juneau en avión o a través de una de las muchas líneas de cruceros que visitan esta región. También puedes llegar en coche, pero tendrás que tomar un ferry (transbordador) en alguno de los puertos de Washington o la Columbia Británica. El ferry atraviesa el Pasaje Interior y te brinda hermosas vistas del campo al sur de Juneau. Lo mejor es visitar la ciudad entre abril y noviembre, cuando el clima es templado y puedes admirar Juneau en todo su esplendor.