El hotel, en genral, todo bien. Pero nos encontramos que no teníamos ni jabón, ni shampoo, ni nada de los amenities. Quise llamar a la recepción para pedirlos, pero el teléfono, no funcionaba. Además no encontramos ninguna carpeta con toda la información del hotel en la habitación.
Cuando mi marido fue a recepción a pedir jabón, la recepcionista tuvo una reacción rara diciendo: Ah, necesitan jabón¨y nos entregó dos barras pequeñas de jabón.¨
El restaurante es muy bueno. La camarera muy buena y muy amable.
La ubicación del hotel es perfecta, pero para llegar con el coche es un poco complicado, ya que no se puede entrar al casco antiguo con coche, excepto si vas al parking del hotel.