Nada mas llegar nos dieron una habitación en planta baja.
Habíamos elegido mountain suite por vistas,jamás imaginamos que las vistas eran para los que pasan por delante de tu habitación (toda una cristalera a la calle),si no quieres ser visto echas las cortinas y te quedas sin una gita de luz.
Después de pedir cambio de habitación, la recepcionista dice que imposible porque las de planta superior no se pueden utilizar(estando hotel vacio)
La sorpresa es que al día siguiente es ocupada habitación de arriba,y encima estando todo vacio le dan una encima de la nuestra,para estar escuchando pisadas durante una hora (justo a la hora de dormir).
Una única toalla de manos para tres,que por supuesto no cambiaron al día siguiente, la tuve que pedir en recepción.