El hotel es muy bueno en general, las habitaciones son espaciosas comparado con otros hoteles, la ubicación es buena sobre todo para moverse en tren o metro (está a dos cuadras de Penn Station). La zona es muy sucia en general, aunque en realidad ya casi en todos lados de NY, hay muchos homeless en la zona. Hay buenas opciones para comer cercanas, es fácil moverse en la zona, sólo con cuidado. La limpieza de la habitación hay que solicitarla como ahora en muchos hoteles, la cortina del baño estaba sucia, fue el único inconveniente. El desayuno es muy bueno, el restaurante aunque está en el hotel, no es parte de la misma administración, pero la comida es muy buena, el desayuno es particularmente bueno.