Pasamos dos noches en este hotel. Es un Ibis, ya sabes que esperar... barato, limpio, habitaciones diminutas y poco más. Está bien situado si te mueves en coche, a unos pocos minutos de Porto, tiene parking exterior gratuito. Está bien para pasar una o dos noches, la habitación es muy pequeña, con camas muy estrechas... si eres corpulento como yo, no dormirás del todo bien. El baño es plasticoso y feo pero funcional y limpio. El personal correcto, el wifi bien y el desayuno bastante justito, pero es que por el precio no se puede pedir más. Relación calidad-precio difícilmente superable. Lo recomiendo y volvería.