Excelente ubicación, en la rambla de Copacabana. Habitación muy cómoda, amplia y con aire acondicionado perfecto.
Lobby impecable, y terrazas, tanto la superior como la de planta baja buenísimas para sentarse a tomar algo o solo a mirar el panorama.
Lo malo : 1) La piscina es minúscula para un hotel para tantos huéspedes, la usé una sola vez porque el agua estaba turbia, no te veías ni las piernas. 2) el desayuno está bien, pero no es excelente, nada que ver con las fotos que muestran en la página.