Vaya sorpresa que se lleva uno respecto a las fotos que publican para vender, este “hotel” parece una vecindad, muy deteriorado, la alfombra horrible del cuarto, la manija de la regadera se caía, a pesar que si deseábamos el servicio de limpieza diario en el cuarto, nunca lo hicieron, un show para conseguir toallas limpias, los champús o jabones olvídate de conseguir, tuvimos que comprar mejor en un seven. El “desayuno” que cosa más espantosa, un mini omelette frío, huevo duro y unas mini salchichas horribles. Pero la joya de la corona de este “hotel” fue que despertamos el día de nuestra salida y sorpresa… no estaba el carro que rentamos! Resultando que movieron todos los vehículos por reparación del área de estacionamiento, fui directo a recepción donde me alegaron que avisaron a todos los huéspedes que se iban a mover, lo cual no es verdad, si quieres enterar a los huéspedes dejas una carta en la habitación dejando ver qué harán trabajos no una simple hoja pegada en una columna que ni a la vista está y sobre todo que es grande el “hotel”. En resumen… paga un poco más y disfruta de una verdadera estancia. P.D. En los colchones sientes los resortes y agujeros.