El hotel estaba full ya que se estaba presentado una competencia de gimnasia cerca de las instalaciones, los ascensores uno estaba dañado y era un caos tomar uno para poder bajar o subir, el desayuno era hasta las 10 los fines de semana y a las 9 :30 ya no había nada de comer y no hacían reposición lo mismo me pasó el lunes bajamos a comer y no había sino leche y cereal. Muy mala la atención en él área