La gran área verde central de Belo Horizonte, que cuenta con teatros, lagunas y un parque de diversiones, es una opción muy divertida para toda la familia.
Observa las impresionantes formaciones rocosas y observa a las tortugas que anidan en este paraíso para surfistas que cuenta con algunas de las mejores olas del país.
Pasa un tiempo en el corazón gubernamental de la capital, el cual tiene una historia importante, visitas guiadas informativas y una asombrosa arquitectura.
Esta montaña que emerge del centro de la ciudad es conocida principalmente como la sede de la emblemática estatua de Jesús, del tamaño propio de un rascacielos, en Río.
Descubre poderosas ideas mientras exploras paisajes futuristas, monumentos y fenomenales construcciones de Oscar Niemeyer en el dinámico Distrito Federal de Brasil.
Observa el icónico trabajo de los artistas más famosos del mundo junto al de figuras nacionales de los movimientos artísticos del siglo XX en esta moderna galería.
En una ciudad dominada por el concreto y los rascacielos, este sofisticado jardín es el lugar perfecto para tomar un poco de aire fresco y ver animales nativos.
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Visita Fernando de Noronha para observar los fuertes en las colinas y las sombras de las formaciones rocosas al atardecer. Nada con las criaturas marinas de colores en el océano.
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La zona antigua de Porto Seguro es el sitio donde los portugueses se establecieron por primera vez en Brasil. Pasea por las calles polvorientas, visita las iglesias del siglo XVI y disfruta la magnífica vista de la costa.
Conocida como la cuna del surf brasileño, esta pequeña playa es además uno de los mejores lugares para ver las increíbles puestas de sol de Río de Janeiro.