Pocos lugares en el mundo son tan fascinantes como Estambul bajo la puesta de sol. A bordo de un elegante yate, bebiendo champán y saboreando crudités y frutas en platos preparados con buen gusto, pasarás por palacios y minaretes mientras navegas por el Bósforo en este relajante crucero.

Al anochecer, llegan brisas relajantes del mar de Mármara y el cielo de la ciudad se viste con un vestido colorido, teñido con tonos de naranja y rosa. El muecín llama desde un altísimo minarete. Majestuosos palacios y villas permanecen inmóviles a lo largo de las orillas del estrecho, como si nada hubiera cambiado en un milenio. Respira el legado de la antigua Bizancio, Constantinopla y el poderoso Imperio Otomano con cada bocanada de aire fresco y salado.

Relájese y surque olas suaves en la comodidad de un yate. Observe cómo pasan la ciudad y sus lugares emblemáticos, una forma perfecta de relajarse después de un ajetreado día de turismo.