La primera parada lo llevará al parque Tihtoushan, que alguna vez fue una importante zona militar restringida debido a su terreno elevado. Preservando su belleza natural, el parque cuenta con una exuberante vegetación primaria y ofrece vistas cautivadoras de los islotes gemelos en forma de vela (Double Rock) que emergen del mar.
A continuación, explorará el famoso centro de aguas termales públicas de la comunidad de Huanggang, que cuenta con una de las piscinas para pies más pintorescas de la costa norte de Taiwán. Rebosante de agua termal rica en hierro, el exclusivo tono marrón dorado de la piscina es el resultado de la oxidación, lo que da origen a su nombre, «Golden Spring».
Después de mimar tus pies con un relajante baño, emprende un viaje gourmet por la antigua calle Jinshan. Desde la famosa carne de pato de Jinshan hasta las batatas, disfrute de una variedad de delicias culinarias como tortitas de cebolleta, etc. Los gastos del almuerzo corren por tu cuenta, ¡así que disfruta de los sabores y la atmósfera de esta histórica calle de 300 años de antigüedad durante tu aventura gastronómica!
Después del almuerzo, disfrute de un tranquilo paseo por la costa norte hasta su próximo destino, el Templo de las Dieciocho Deidades. Durante la renovación del templo, se instaló una gran estatua de bronce de 30 metros de altura del perro leal, que sirvió como un tributo duradero a su máximo sacrificio.
Tras explorar el templo, la siguiente parada es el Arco de Piedra de Shimen, una maravilla natural esculpida por la fuerza incesante de las olas del mar y la elevación geológica. Esta formación rocosa única cuenta con un arco de 10 metros de altura, que ofrece a los visitantes vistas panorámicas del extenso cielo y el mar infinito.
La siguiente es la joya de la temporada, el exclusivo arrecife verde de Laomei, reconocido por la CNN como una de las ocho maravillas de Taiwán. Cada año, de marzo a mayo, la superficie del arrecife es golpeada constantemente por las olas del monzón del noreste, lo que fomenta el crecimiento de algas. El fascinante tono verde del arrecife es el resultado de este crecimiento de algas. Este encantador espectáculo atrae a decenas de miles de visitantes cada año, todos deseosos de capturar su cautivadora belleza.
Antes de concluir su recorrido, prepárese para un cautivador desvío hacia el laberinto de Laomei. Este laberinto circular, construido con paredes de ladrillo, emana un encanto encantador que recuerda a una insignia mística dejada por visitantes extraterrestres.
Por último, te aventurarás al punto más septentrional de Taiwán, el faro del cabo Fugui. Alrededor del faro hay un pintoresco sendero para caminar que invita a los visitantes a deambular y disfrutar de los impresionantes panoramas costeros de la costa norte de Taiwán.