Recímate en tu alojamiento y dirígete a Gueliz & Hivernage, la parte moderna de la ciudad, construida por colonos franceses a principios del siglo XX. Hoy en día es un concurrido centro de marcas internacionales y cafés de moda, así como «los Campos Elíseos de Marrakech».
A continuación, visite el exquisito Palacio de la Bahía para admirar la fina arquitectura morisca y los magníficos azulejos de cerámica. Desde aquí, pasee por el barrio judío, donde podrá comprender mejor el papel vital de la cultura y la comunidad judías en el desarrollo de la identidad única de Marrakech.
Llegue a la impresionante mezquita Moulay El Yazid, luego vea la Bab Agnaou, una de las 19 puertas de Marrakech y la entrada principal a la Kasbah Real, y descubra la histórica Medersa Ben Youssef, un tesoro arquitectónico enclavado en el corazón de la antigua Medina. Por último, pasea por los fascinantes laberintos del mercado al aire libre más vibrante y colorido de la ciudad.
Pasea por bazares llenos de encanto y carácter, puestos repletos de pociones misteriosas, montones de especias coloridas, alfombras exquisitas y mucho más. La combinación de sonidos, imágenes y olores es suficiente para que incluso los viajeros más empedernidos se sientan completamente hipnotizados.