La primera referencia histórica del Castillo de Bran, el Castillo de Drácula, es un documento emitido el 19 de noviembre de 1377 por el rey de Hungría, mediante el cual los habitantes de Brasov recibieron el privilegio de construir la fortaleza. Entre 1920 y 1927, el castillo de Bran fue restaurado bajo la supervisión del arquitecto de la corte real, quien lo convirtió en una hermosa residencia de verano rodeada por un parque con callejones, un lago, fuentes y una casa de té. En 1938, la reina María de Rumania legó el castillo de Bran con todos sus dominios a su hija, la princesa Ileana, quien lo poseyó hasta 1948.

Castillo de Peles: aquí se encuentra uno de los palacios reales mejor conservados de Europa. El castillo está lleno de adornos tanto por dentro como por fuera, y cuenta con elaboradas esculturas de madera y pinturas que representan escenas de las obras del compositor alemán Richard Wagner.

Brasov está rodeada por los Cárpatos del Sur y forma parte de la región de Transilvania. Brasov es un buen punto de partida para viajar por Rumanía. También es la ciudad más grande en una zona turística de montaña. La ciudad antigua en sí está muy bien conservada y se puede ver mejor tomando el teleférico hasta la cima de la montaña Tâmpa (995 m), un hermoso mirador.