Nuestra excursión comienza en Molde, centro administrativo del condado de Romsdal. La ciudad se encuentra a orillas del fiordo Romsdal, rodeada de colinas que proporcionan un telón de fondo de 222 picos que están cubiertos de nieve casi todo el año. Molde también es conocida como la Ciudad de las Rosas, gracias a los fragantes viveros de rosas que se benefician del clima templado y el suelo fértil en las laderas bañadas por el sol que rodean la ciudad. La ciudad aún tiene el mismo aire de calma y tranquilidad que convenció a Ibsen de convertirla en su hogar.

Nuestro autobús nos llevará a través de algunas de las mejores estaciones de esquí de la zona antes de descender al pueblo de Eide, con vistas al fiordo Kornstadfjord.

Desde aquí tomamos la espectacular Carretera del Océano Atlántico, una maravilla de ingeniería que une islas y arrecifes a través de una serie de puentes. En 2005, fue declarada la Construcción Noruega del Siglo, el impresionante tramo de costa definitivamente se ha ganado el estatus de Ruta Turística Nacional. Tendremos una parada fotográfica para que puedas admirar los puentes, tomar fotos y tener tiempo para dar un pequeño paseo por los alrededores.

Nos dirigimos hacia Hustadvika, un tramo de agua que puede ser espectacular a la vista cuando aparece mar agitado pero que no es muy querido por los marineros. Está lleno de arrecifes submarinos y pequeñas islas. Cuando el clima es hermoso, es posible que puedas ver focas y ballenas nadando allí.

Un poco más adelante, tenemos una parada para fotos en el encantador pueblo pesquero de Bud, con vistas al océano con vistas a las islas Bjørnsund. El grupo de islas alguna vez fue el hogar de una vibrante y floreciente comunidad pesquera, hoy en día son un retiro de vacaciones de verano.

En nuestro camino de regreso a Molde viajaremos subiendo y bajando hermosas laderas alrededor de otra encantadora ensenada natural, el Frænafjord. Al final del recorrido subimos a 407 metros sobre el nivel del mar hasta el mirador Varden, donde tendremos maravillosas vistas sobre el fiordo Romsdalsfjord, la miríada de pequeñas islas que se encuentran dispersas frente a la ciudad y las montañas (Alpes Romsdal) al otro lado del fiordo.