En este recorrido, nos adentraremos en el cautivador mundo del «fileteado», un estilo artístico que surgió a principios del siglo XX en Buenos Aires. El término, que tiene sus raíces en el prefijo latino «filo» que significa «pisada», denota una forma ornamental que revolucionó el paisaje visual de la ciudad. Ahora es reconocido por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Más que solo decoración, fileteado cuenta la historia de la ciudad misma.
Tu viaje comienza en la esquina histórica de El Federal, uno de los emblemáticos Bares Notables de Buenos Aires, donde el alma de la ciudad parece hacer eco en cada azulejo y cada cuadro. Frente a un mural fileteado pintado a mano, su guía experto le presentará la esencia de este arte único argentino y su profunda conexión con la identidad porteña.
Mientras caminas por las calles empedradas de San Telmo, el barrio más antiguo de Buenos Aires, descubrirás que este distrito es como un museo al aire libre. Las obras de arte fileteado adornadas embellecen los letreros de calles, escaparates y paredes, transformando el área en un lienzo colorido.
Su camino conduce a la histórica Iglesia de San Pedro González Telmo, hogar de piezas del gran Martiniano Arce, y continúa en el corazón del icónico Mercado de San Telmo, donde la tradición, el sabor y la cultura se mezclan a la perfección.
Y justo cuando crees que lo has visto todo, ahora es tu turno de pintarlo tú mismo.
En una merienda clásica al estilo porteño (una cafetería o té con dos medialunas), te unirás a un fileteador profesional que te guiará a través de las técnicas y secretos de esta artesanía atemporal. Con el pincel en la mano, crearás tu propia obra maestra para llevarte a casa, un recuerdo tan único como la experiencia en sí. Además, recibirás un certificado especial para conmemorar tu aventura artística.