Castelmola, gracias a su impresionante panorama y sus colores, está considerado uno de los pueblos más bellos y pintorescos de Italia. Sus tesoros histórico-artísticos, entre ellos el castillo y los monumentos medievales, la distinguen como una pequeña joya en la provincia de Messina. Su nombre deriva de la fortaleza normanda que representa su símbolo y de la que hoy sólo quedan ruinas. Nuestro recorrido comenzará desde el centro histórico, que con características puramente medievales se divide en un laberinto de calles estrechas. Entre nuestras principales paradas, también estará el famoso Bar Turrisi, caracterizado por la presencia de formas fálicas como decoración entera. Esta idea, sin embargo, no debe considerarse vulgar, sino más bien una fuerte influencia de la antigua cultura griega como símbolo de libertad, fertilidad y vida. Aquí podrá degustar el famoso vino de almendras, los excelentes cannoli sicilianos y muchos otros productos típicos.

La tercera parada de nuestro recorrido será Taormia. Gracias a su maravillosa ubicación y su belleza natural única, esta ciudad es considerada la Perla del Jónico. El nacimiento de este importante centro turístico está ligado a la llegada, en el año 358 a.C., de unos refugiados griegos procedentes de la cercana ciudad de Naxos, una antigua colonia griega. De este origen surgió el nombre de Tauromènion, que luego evolucionó hasta convertirse en el actual. El centro histórico es rico en monumentos y su conformación natural hace que Taormina parezca una hermosa terraza panorámica. Hay muchas cosas que tendrás la oportunidad de visitar y ver en Taormina, entre todas está sin duda el Teatro Griego, símbolo de esta ciudad, que ofrece una vista impresionante del mar turquesa y del golfo dominado por el Etna. Además, Corso Umberto, el corazón palpitante de Taormina, le hará perderse entre las numerosas tiendas y las características calles y pequeñas escaleras decoradas con temática siciliana y llenas de símbolos típicos de nuestra bella Sicilia.