Únete a un talentoso chef local nacido y criado en el corazón del mercado de alimentos más auténtico de Florencia en un recorrido gastronómico inolvidable entre los puestos del mercado de abarrotes de Sant'Ambrogio. Recorre la Cuna del Renacimiento y conoce los platos básicos de la cocina toscana de la mano de un excelente chef con estrellas.

¡Reúnete con tu guía de chef especial en el corazón de Florencia y comienza la aventura con un espresso! Prepárate para caminar junto con el chef por las puertas del mercado de alimentos de Sant'Ambrogio: el templo sagrado florentino de productos frescos y genuinos desde 1873.

Comienza desde la tienda de salami y prueba los embutidos toscanos más famosos. Desde el clásico prosciutto hasta salame y finocchiona, haz cosquillas a tu apetito con un sabroso plato de salami.

Sigue explorando las profundidades del mercado y detente en el puesto de quesos para tu segunda degustación. Prueba algunos de los formaggi locales más famosos mientras descubres el increíble arte de hacer queso.

Ahora es el momento de ponerse serio: tome asiento y pruebe algunos de los verdaderos pilares de la cocina toscana, directamente desde el mostrador de la delicatessen. Desde pappa al pomodoro hasta brasato y francesina, prueba los platillos del día mientras saboreas un vino fuerte de la casa. Tómese su tiempo para disfrutar de los ricos sabores de la tradición local, elaborados con ingredientes simples y modestos, mientras se relaja antes de la segunda parte del recorrido.

Luego saldrás del mercado y, después de un corto paseo por el animado barrio de Sant'Ambrogio, llegarás a una pequeña tienda de vinos donde probarás dos de los mejores vinos locales. La Toscana es, de hecho, famosa en todo el mundo por sus vinos de alta calidad y tendrás la oportunidad de degustar una copa de vino tinto y una copa de vino blanco, maridados con un par de bruschettas, o crostoni, como dicen los lugareños. ¡Levanta tus copas y haz un brindis! Disfrute del ambiente relajado de la enoteca y beba lentamente sus vinos para apreciar mejor todos y cada uno de los matices de sabor.

¡Es hora de la última parada! Nada mejor que terminar tu recorrido con el postre más querido del mundo: el helado italiano. *Cono o coppetta*, elige tus sabores favoritos de una de las mejores heladerías de la ciudad. Deja que su colorido despliegue te hechice: puedes atreverte a ser audaz y probar algunos de sus sabores más poco comunes o apegarte a los clásicos, de cualquier manera conseguirás por qué cada excusa bastará para que los italianos coman un helado todo el año, ¡incluso en invierno!