Estancia agradable y personal simpático. Ahí termina lo bueno.
La ubicación es también buena, muy cerca de la estación de Tarnby, y con numerosas tiendas en los alrededores. Lejos del centro.
Nosotros estuvimos 6 días, y si para 3 ya van justos en limpieza, imaginaos para una semana. La mayoría de los días únicamente reponen, y en alguna ocasión solamente se asoman para tirar toallas. Limpiar nunca. Y reponer en alguna ocasión tampoco.
Dan igual las indicaciones, van a hacer lo que les venga en gana. Si cuelgas toallas te las cambian, si las dejas en el suelo tal vez no... en fin. Todo un desorden.
La habitación es justita en todo. Del baño mejor ni hablar, parece que estás en una cárcel más bien.
Para el precio me parece caro, a pesar de ser Dinamarca, ya que se asemeja más al concepto de un motel de carretera que otra cosa.