En cuanto al personal que nos atendió no hay queja alguna, las habitaciones y la limpieza muy bien. No nos gustó la playa, está llena de piedras, ni siquiera puedes sentarte ahí a contemplar el mar, el hotel está lejos de todo. Nuestra horrible experiencia fué que ¡NOS ROBARON! Se metieron por el balcón mientras dormíamos (la puerta del balcón estaba descompuesta y no cerraba el seguro), se llevaron mi cartera, teléfono celular, ¡incluso las maletas! Gracias a Dios no nos hicieron daño físico ni a mis hijos ni a nosotros. El hotel no se hizo responsable de nada, no nos apoyaron en nada, solo dijeron que eso nunca había pasado y que nos pedían una disculpa. No cuentan con la mínima seguridad a pesar de que está en medio de dos terrenos baldíos (eso no te lo informan al reservar). Definitivamente jamás volvería a ese hotel y obviamente NO lo recomiendo.