Ubicación perfecta, habitación espaciosa, limpia y cómoda, aunque aire acondicionado demasiado fuerte en estancias compartidas. Desayuno muy correcto para ser US (bagels, café, fruta…). Como inconveniente decir que para el pago no nos aceptaron varias tarjetas de crédito de Europa, por suerte al final con una funcionó. Por lo que llevaría cash por si acaso. Lo de las tarjetas también ocurre en restaurantes o supermercados, y a veces se soluciona con la ayuda del manager del local, el cual debe poner un código específico que no conoce el resto de personal.