Durante casi 90 años, La Habana estuvo prácticamente cerrada para los visitantes de algunos países, como los Estados Unidos. Visita esta ciudad fascinante y disfruta su gran historia, sus tradiciones únicas y su creciente sofisticación.
Comienza tu exploración de La Vieja Habana con un paseo en un auto antiguo o una carroza de caballos. Contempla los lugares de interés histórico construidos a principios de los años 1900. Visita El Capitolio, que fue el centro de gobierno hasta la revolución cubana, a finales de la década de 1950. Su gran cúpula se parece a la del Capitolio de los Estados Unidos.
Camina hacia el Museo Nacional de Bellas Artes, un edificio impresionante que se terminó de construir en 1953, el cual cuenta con varias colecciones orientadas al arte cubano desde el siglo XVII hasta la era moderna. El Museo de la Revolución está a cinco minutos a pie de este edificio. Visita este museo con calma para comprender las razones por las que Fidel y Raúl Castro, así como el Che Guevara, organizaron guerrillas para derrocar la presidencia de Batista, así como las consecuencias de estos actos revolucionarios.
Dirígete al malecón interior que está ubicado a lo largo del puerto de La Habana y el Canal de Entrada. Observa la gran catedral de estilo barroco hecha de coral en la Plaza de la Catedral. Escucha la música mientras disfrutas una comida en una cafetería cerca de la Plaza Antigua. Disfruta las empanadas, los mariscos, o el tradicional arroz cubano con frijoles. Regresa a este sitio en la noche para disfrutar un cocktail. Los daiquirís, los mojitos y otras bebidas preparadas con el ron de la región son especialmente deliciosas en este ambiente tropical. Para terminar, disfruta un auténtico puro cubano o una tarta tradicional.
La Fábrica de Arte Cubano es una antigua fábrica de aceite de cocina en donde puedes encontrar arte ecléctico, música, alimentos y bebidas, y es un sitio muy popular entre los visitantes y los habitantes de la región. El Malecón recorre la orilla de la bahía y cuenta con una hermosa vista al mar. Visita este lugar para disfrutar un atardecer o para unirte a alguno de los grupos de jóvenes que salen de fiesta en la noche.
La Habana está ubicada en la punta norte de la isla de Cuba. Reserva tu estancia con mucho tiempo de anticipación, ya que los hoteles se llenan rápido. Asegúrate de cumplir con las restricciones que apliquen en el momento de tu viaje al reservar tu vuelo hacia el Aeropuerto Internacional de La Habana.