Lo mejor es la ubicación, en la plaza de Pradollano y cerca de todo. El apartamento en general está bien pero tiene algunas pegas: la cama supletoria incómoda, almohadas lo peor, el agua caliente de la ducha da para 2 o máximo 3 personas incluso dejando tiempo entre una y otra (es apartamento para 5), el suelo tenía manchas que no se quitaban, también algunas colchas, ropa sucia de anteriores inquilinos dentro de los cajones, la cadera con café cuando llegamos. Tiene un lavavajillas pequeñito muy práctico pero no hay limpialavavajillas y para unos días no compensa comprarlo, dejan solo 2 royos de papel higiénico, la cubertería un poco sucia. Enchufes en malas condiciones. La TV se veía fatal. En conclusión es un apartamento cómodo que interesa por su ubicación pero en cuando a servicios y limpieza tendrían que mejorarlos.