Un magnífico hotel para pasar unos días en Ciudad de Panamá. Situado en una zona tranquila, con buenos servicios, recepcionistas extremadamente amables, habitación muy limpia y cómoda, con un buen aire acondicionado, nevera, y espacio más que suficiente para estar cómodo. Muy cerca hay varios restaurantes y otros establecimientos muy convenientes.
La única nota negativa es el desayuno, muy poco variado y repetitivo (huevos revueltos, algo de carne, arepas o similar, tostadas, y un pequeño bol de fruta que muchos días estaba congelada), nada que ver con el que tendría que ser el standard para esta categoría de hotel.