Pasamos 6 días en el hotel y estuvimos muy bien. Reservamos con tiempo y nos salió bastante bien de precio. Se halla en un calle muy tranquila se encuentra muy próximo a las estaciones de metro de Les Globelins (línea rosa) y Corvisart (línea verde).
Las habitaciones son pequeñas pero limpias. Tampoco necesitábamos mucho más, pues hemos estado más fuera que dentro.
El desayuno es completo, se sirven cafés, chocolate, zumos y diferentes tipos de te. En cuento a la comida, croissants, magdalenas, napolitanas, pan tipo baguette y pan de molde. Surtido de mermeladas, miel, crema de cacao, quesos, jamón de york y revuelto de huevo. Yogures, queso y triturados de fruta.