Retiro romano en el corazón del encanto histórico de la ciudad, estratégicamente ubicado a solo un corto paseo del bullicioso centro, pero alejado del ajetreo turístico. El prestigioso barrio de Prati ofrece un oasis único y tranquilo.
El atractivo de esta casa se ve magnificado por la pieza de resistencia: una amplia terraza de 360 grados, una joya rara en la ciudad. Disfruta de vistas sin igual de los iconos de Roma, desde la Basílica de San Pedro hasta la Escalinata de la Plaza de España.
El prestigioso barrio de Prati ofrece un oasis único y tranquilo. Convenientemente situado cerca de la Piazza Cavour, el apartamento ofrece fácil acceso a varias paradas de autobús, lo que garantiza una exploración fluida de la ciudad.
Situado en la sexta planta de un edificio antiguo, el apartamento es fácilmente accesible a través de un ascensor espacioso.
Al entrar en el amplio vestíbulo, encontrarás una zona de estar y comedor diseñada con buen gusto. La sala de estar, adornada con un cómodo sofá y un televisor inteligente de pantalla plana, se abre a un balcón con vistas a San Pedro. La mesa de comedor para seis completa el ambiente, creando un entorno perfecto para comidas compartidas y relajación.
La singularidad de este hogar continúa en el dormitorio principal, que cuenta con un lujoso baño en suite, un vestidor y un televisor inteligente de pantalla plana. La habitación ofrece un balcón privado con vistas panorámicas a la Basílica de San Pedro. La segunda habitación, un encantador individual, cuenta con un armario espacioso, un baño contiguo con ducha y su propio televisor inteligente.
La tercera habitación tiene otra vista increíble del Vaticano y la ciudad. Es adaptable para acomodar a dos personas, con dos camas individuales que, si es necesario, se pueden unir para crear una cama doble.
La cocina de buen tamaño y totalmente equipada es un deleite para los amantes de la cocina, asegurando que tengas todo lo necesario para tus aventuras culinarias.
Sin embargo, el verdadero punto culminante es la terraza sin igual, accesible a través de una escalera de caracol, que ofrece un escape exclusivo para disfrutar del encantador skyline romano. La gran mesa de comedor y la barbacoa hacen de la terraza el lugar perfecto para noches inolvidables.