Por Expedia Team, el August 31, 2016

Cómo planear un viaje a Europa con niños

He viajado varias a veces a Europa con mi hija desde que era pequeña y también he tenido la oportunidad de compartir charlas con otras mamás viajeras sobre el tema y es que planear un viaje con niños no es lo mismo. Acepto que la primera vez estaba muy nerviosa de llevarla tan lejos, de que probara otras comidas, que se adaptara al horario, en fin, eran tantos temores, pero la experiencia resultó mucho mejor de lo esperado y comprendí que los niños se adaptan mucho mejor y más rápido que los adultos.

Mamá e hija en Londres

Para comenzar, les comento que a diferencia de América del norte, donde hay tantas facilidades para viajar con niños, en Europa no ocurre así, aunque con el tiempo ha ido cambiando la situación. Cuando fui por primera vez con mi hija en 2007 era poco común encontrar baños familiares, servicios y menús infantiles; pero en cada viaje voy descubriendo que todo cambia para felicidad de los padres y facilitar los viajes con niños.  Independientemente de todo, Europa es capaz de fascinar también a los pequeños.


Si es la primera vez que planeas un viaje a Europa estos pasos para la planeación te pueden ser de gran utilidad.


Cómo planear viaje a Europa con niños

Para comenzar, es importante que planees un itinerario cómodo para todos, no te aceleres queriendo visitar muchos países, dos o tres serán suficientes en una estancia de hasta 3 semanas. Si consideran permanecer más tiempo podrías contemplar ir a 4 países.

Antes del viaje busca programas, películas, fotos y literatura sobre los países que visitarán, y véanlos juntos, así se sentirán más atraídos y emocionados. Investiga sobre locaciones en las ciudades que visitarán, o bien la relación que hay entre algunos sitios con programas y películas de dibujos animados, eso encanta hasta a los adultos. Por ejemplo, que el Castillo de Neuschwanstein en Alemania inspiró al Castillo de la Bella Durmiente en Disneyland; y la historia del jorobado de Notre Dame es buen pretexto para visitar la Catedral en París y subir a ver las gárgolas.

Catedral de Notre Dame, París
Catedral de Notre Dame, París

Visita países que estén cercanos para amortizar el gasto de transporte y que los trayectos no sean agotadores para los niños. Por ejemplo: Francia, Alemania y República Checa. Este recorrido sería ideal porque están juntos y nivelarías también el gasto, pues mientras París es una de las ciudades más caras de Europa (pero también la más visitada y deseada), Alemania tiene destinos de presupuesto medio y hay bastantes cosas para hacer gratis; y República Checa es de los países más baratos del continente. Otras opciones podrían ser: Inglaterra, Bélgica y Francia; España, Portugal y sur de Francia; Italia y Suiza, por mencionar sólo algunos.

No recomiendo los viajes organizados porque suelen tener salidas muy temprano, incluir cenas hasta muy noche y consisten en pasar muchas horas en autobús; prefiere en todo caso tomar tours locales o hacer las visitas por su cuenta y a su ritmo.

Durante el vuelo, cuida que tomen mucha agua natural, que duerman y coma bien (no muy pesado ni muchos dulces). Ármate con todo para entretenerlos: revistas, colores, libros para colorear y juegos. Y prefiere los aviones con pantalla de entretenimiento personal. Verifica también el menú infantil y recuerda que ese lo debes solicitar antes del vuelo.

Muchos museos, por no decir todos, tienen entrada gratuita para los menores de 15 ó 17 años, más o menos. Checa las tarifas antes de comprar las entradas. Por cierto, lleva siempre contigo una copia de su pasaporte por si quieren confirmar la edad.

Niña en avión

Dos últimos tips como mamá: lleva agua o jugo, los que puedes comprar en el supermercado, porque dentro de los museos y atractivos son carísimos. Y acostumbra las visitas a museos por la mañana porque cierran temprano y así los niños van descansados y podrán más atención.