Barcelona, la capital de Cataluña, es una ciudad costera de 2.5 millones de habitantes. Las calles serpenteantes de la ciudad están repletas de bares de tapas, y los bailarines tradicionales divierten a los espectadores en las plazas públicas. La influencia del arquitecto modernista Antoni Gaudí se percibe en todas partes, desde parques en las laderas de las colinas hasta edificios públicos.
No te recomendamos conducir en Barcelona. Trasládate en el metro, las líneas de autobuses o en bicicleta. O mejor aún, ponte unos zapatos cómodos y sal a conocer. Barcelona. La ciudad está hecha para caminar y esa la mejor manera de disfrutar sus paisajes, sonidos y sabores.
Pasea por las calles de Las Ramblas, en el corazón de la ciudad. El paseo arbolado va de la Plaza de Cataluña, en el norte, hasta el puerto, al sur. Los restaurantes, puestos de flores y tiendas de recuerdos bordean las banquetas. Los artistas callejeros entretienen a las familias durante el día y los bares están llenos hasta muy entrada la noche.
Explora el Distrito Gótico, al norte de Las Ramblas. Aquí encontrarás la Catedral de Barcelona, construida en el siglo XIV, que alberga los restos de uno de los santos patronos de la ciudad, Santa Eulalia de Barcelona.
Súbete al teleférico pare llegar hasta la cima de Montjuic, una imponente colina cerca del centro de la ciudad, y pasa todo un día explorando muchas de sus atracciones. Refréscate en la Fuente Mágica (Font Magica), frente al Palacio Nacional (Palau National) neobarroco, antes de ir a disfrutar las artes y la cocina tradicionales de la Villa Española (Poble Espanyol).
Los fantásticos edificios de Gaudí son de lo más destacado de Barcelona y los puedes explorar en orden cronológico. Comienza con su primera casa, la Casa Vicens, antes de terminar en su obra maestra final, la Sagrada Familia. No te pierdas el Parque Güell, que tiene una terraza de mosaicos con vistas de la ciudad y la bahía.
En Barcelona hay más de 50 museos. Descubre dibujos infantiles del más grande artista español en el Museo Picasso y después dirige el timón hacia el Museo Marítimo (Museu Maritim), en los históricos astilleros del siglo XIV.
Barcelona es un excelente destino familiar. Pasa un día en la playa con la gente del lugar o conoce cómo es la vida bajo las olas en el Acuario de Barcelona. Por la tarde disfruta la música catalana en el Palau de la Musica Catalana, antes de salir a las calles y plazas para sentir la atmósfera de Barcelona al anochecer.