Pasamos 3 días muy agradables en el hotel Promenade. La ubicación del hotel es muy buena (en la calle peatonal, donde están las grandes tiendas Zara, H&M, etc.), cerca de todo y a un par de cuadras del Danubio. El desayuno muy variado y bien servido. No tengo comentarios negativos sobre el hotel, pero, eso sí, cuidado cuando se bañen, porque no hay mampara en el baño y si abren la ducha al máximo, se inunda todo!