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El hotel en conjunto no estaba mal. Un poco anticuado. Un baño decorado de manera extraña. Pero nada grave. Sin embargo, tuvimos un problema con la calefacción, que se puso en marcha de manera inexplicable en nuestra habitación (el personal decía que no podía ser, que llevaba meses apagada) y nos llevó a despertarnos a media noche, acalorados y sudorosos. No había manera de apagarla desde la habitación. Llamamos a recepción. La persona que la atendía, incrédula, subió a la habitación y comprobó que en efecto, el radiador estaba muy caliente. Nos dijo: "no puedo hacer nada, lo siento, debería estar apagada. Coméntelo mañana en recepción, para ver qué respuesta les pueden dar ellos." Entendimos que al día siguiente nos ofrecerían algún tipo de compensación por el mal servicio. Pero la única respuesta fue "lo sentimos". Al preguntar "¿eso es todo?", la persona de recepción nos dijo "He pasado su queja a la dirección, y ahora está en sus manos". Y ahí se quedó la respuesta. Esto fue hace más de una semana, y no ha habido ninguna comunicación, ni mensaje de ningún tipo.
Josu
Se hospedó 1 noche en agosto de 2018