Corcovado, que en portugués significa “jorobado”, es una montaña ubicada en el Parque Nacional de Tijuca, en el área céntrica de Río. La montaña ofrece tres atracciones en un solo lugar. Si bien la estatua del Cristo Redentor es el punto favorito, también podrás apreciar el Parque Nacional de Tijuca, donde encontrarás la selva urbana más grande del mundo, y podrás disfrutar de un recorrido panorámico en el histórico Tren del Corcovado, la atracción turística más antigua del país.

El Tren del Corcovado data de 1884 y, en un principio, se utilizaba como una máquina de vapor para atravesar un terreno inclinado de 3,824 metros (12,545 pies). El sistema ferroviario fue actualizado a comienzos del 1900, cuando se adquirieron vagones eléctricos, como parte de una iniciativa para reforestar el Parque Nacional de Tijuca. El tren es anterior a la famosa estatua de Brasil y fue utilizado para transportar segmentos de la estatua a la cima de la montaña, durante su construcción. Después de 20 minutos de viaje a bordo de los vagones modernizados, podrás disfrutar de la brisa a la sombra de los brazos extendidos del Cristo Redentor.

La estatua de esteatita y concreto reforzado, que es una de las “Siete nuevas maravillas del mundo” comenzó a tomar forma en 1922. La construcción se extendió durante nueve años y la mayor parte de los fondos provino de los residentes católicos de Brasil. Con 38 metros (125 pies) de alto y brazos de una extensión de 28 metros (92 pies), se trata de la quinta estatua de Jesús más grande del mundo. Esta atracción atrae a 300,000 turistas al año, y requiere un proceso de remodelación y mejoras periódicas. Las recientes incorporaciones incluyen escaleras mecánicas, ascensores, y una catedral para bautismos y bodas.

Además de utilizar el Tren del Corcovado, puedes acceder a la cima de la montaña en coche o autobús. Tendrás una espera significativa durante las horas pico del tren, pero es, de todos modos, el método de transporte recomendado, ya que te transporta directamente y con seguridad a la base de la estatua. Evita conducir a la cima de la montaña. Deberás pagar un cargo extra por persona y por auto y, por lo general, las condiciones de la ruta y el estacionamiento no son óptimas.