Posadas en Isla de Malapascua

"Buena relación calidad-precio aunque las habitaciones son antiguas y los baños necesitan renovación. Por el precio, muy razonable. El dueño Santiago se muestra más que dispuesto a ayudar si tu intención es bucear y los precios son los más baratos de la isla."

"El servicio es muy bueno, todo el personal hace su máximo esfuerzo Falta mucho mantenimiento a las habitaciones Entiendo que es una isla con muchas limitaciones pero si van a cobrar como un hotel con estándares internacionales deberían mejorar en el mantenimiento de las habitaciones, checar que todo funcione bien, en mi habitación el aire acondicionado no servía correctamente, tuvimos agua caliente a veces y a veces no, la caja de seguridad no funciona, es un tema pedir amenidades extras, deberían ser un poco más flexibles. Tienen un costo excesivo por el traslado privado de cebu al hotel y de regreso y después tienes que pagar propinas y fees de puerto etc cuando vimos que otras agencias cobran mucho menos y ya incluyen eso, pequeños detalles si ya están ofreciendo un precio muy alto deberían de dar un servicio excelente en esa parte del traslado. La comida es buena. No recomiendo contratar el traslado privado es muy caro hay otras opciones que hacen el mismo servicio por mucho menos precio Pidan habitaciones que den a la parte de enfrente del hotel no a la parte del restaurante la vista es horrible a un cementerio y a una construcción en donde tienes gente viendo a tu balcón todo el día y ruido. Es una isla para ir sino eres exigente y te gusta lo básico no es una isla como otras del mundo que tienen comodidades es más cara que el resto del país y a mi parecer vale la pena para bucear con tiburones y listo "

"Hemos estado varias veces en Malapascua y, al menos una noche, procuramos alojarnos en este resort. Las habitaciones son suficientemente amplias y bien decoradas en un entorno extraordinario y, aunque todo el establecimiento es un remanso de paz en la cada vez más ruidosa Malapascua, recomiendo las que tienen vistas al mar. El desayuno está muy bien, aunque pondría más frutas y cortadas en trozos más grandes. El restaurante Amihan y, especialmente, el Chiringuito, donde comíamos todos los días a la orilla del mar, son extraordinarios por su calidad y variedad. Todo el personal desde el de limpieza, jardineria, recepción y los dueños son excepcionales. También quiero reseñar la tarea de recuperación y preservación de la fauna y flora marinas que desde el hotel, junto a las autoridades de costas filipinas, se está realizando. Este año, en relación a otros, se pueden ver en la playa pública, a la que se entra por el chiringuito,más tiburoncitos así como en las estructuras para la regeneración del coral se podía ver los progresos realizados. "