La habitación es grande, la cama cómoda y confortable. El baño también estaba bien, aunque la ducha (no bañera) era algo extraña. La situación es bastante mala, puesto que está alejado del centro de la Carolina (que tampoco tiene ningún interés turístico). Es decir, es un hotel para ir a dormir y poco más.
Contratamos habitación con desayuno buffet, aunque nos llevamos alguna sorpresa. El primer día, había buffet aunque muy pobre si hablamos de un 4**** (algo de fiambre, huevos y poco más). El segundo día, al bajar a desayunar vimos que no había nada, pero nos permitieron pedir todo lo que quisimos de la carta de desayunos. No era buffet pero desayunamos muy bien.