10/10
Un lugar tranquilo y apacible. Muy bien situado. Los anfitriones, Raffaella y Ciro, fantásticos, siempre dispuestos a orientar sobre la zona y maravillosa hospitalidad. (El mejor café que hemos probado el de Raffaella, y sus postres incomparables). Agradecemos enormemente sus atenciones! Hasta pronto!