Un hotel bonito y grande, pero su principal
Problema es el servicio al cliente (claro solo si eres mexicano), le dan mucha preferencia al extranjero dejando a un lado al vacacionista mexicano, no respetan las reservaciones y los restaurantes de especialidad todo el tiempo están sin disponibilidad. Solamente la señorita Claudia fue la que mostró interés en mejorar el servicio, sin embargo, ya fue el último día. Los dos primeros días el servicios o trato que tuve junto con mi familia fue pésimo. El hotel debe darse cuenta que a pesar de tener huéspedes extranjeros, el huésped nacional también es importante y si van a continuar discriminando al local mejor que no acepten reservaciones de los nacionales.