Nota para 2019: No comenzaremos a aceptar nuevas reservas para el próximo verano hasta febrero, dando a la familia y a los inquilinos que regresan (nuestra primera prioridad) la oportunidad de hacer planes. Por favor, vuelva a consultar la disponibilidad y luego si todavía está buscando.
El rústico Red Point Cottage, construida alrededor de 1930, comparte con otras dos cabinas una península de 19 acres privados, y un muelle de aguas profundas en Seal Cove. Dieciséis de los acres están cubiertos por una servidumbre de conservación a perpetuidad, pero están abiertos para explorar por nuestros clientes. Las impresionantes vistas de la bahía de Penobscot desde el porche grande, y una chimenea de ladrillo para las tardes y los días de lluvia. Senderos de bosque aislados y larga playa privada con piscina de marea. 30 minutos. a Blue Hill y 90 min. al Parque Nacional Acadia.
El dormitorio principal con cama de matrimonio, segundo dormitorio con doble y una individual, tercer dormitorio con dos camas individuales, y un futón cama en la sala de estar. 1 1/2 baños y todas las habitaciones tienen vista al mar. Cocina completa con comedor. Almohadas y mantas; inquilinos son responsables de traer sábanas y toallas propias.
Por las noches y los días de niebla, el salón está bien equipada con una amplia variedad de juegos, rompecabezas y libros, con una gran selección de manuales de estudio de la naturaleza.
El pozo en la propiedad sirve 3 casas, y nunca se ha secado; sin embargo, se recarga lentamente. Pedimos a todos los invitados a practicar una buena conservación del agua (duchas cortas!), y esto es particularmente importante para grupos más grandes.
Nuestra política general sobre mascotas es que le solicitamos que acepte ser totalmente responsable de cualquier daño o costo adicional de limpieza, asegúrese de que estén protegidos contra pulgas y garrapatas, vigílelos de cerca en busca de pulgas o garrapatas que se puedan traer a la casa y traiga arroja los muebles si les gusta trepar, las colchas, las mantas y las almohadas deben mantenerse limpias para los futuros huéspedes, ya que no tenemos ropa disponible. Cualquier excremento alrededor de las casas o caminos debe desecharse adecuadamente. Además, dado que el atractivo de nuestro lugar es su entorno natural, no queremos que los perros sean propensos al ladrido excesivo o que persigan agresivamente a la vida silvestre.