Es de destacar el personal del Restaurante, David el andaluz, Juan el vasco morenito, Noelia la golosa y todos sus compañeros que nos han hecho pasar unas inolvidables vacaciones, esos cocineros en vivo... desde el zumo de frutas sanote de la mañana, hasta los crepes para pecar con los dulces por la noche, muy buena calidad en la comida y un mejor servicio. La habitación, zona prestice, muy bonita, cómoda y lo mas importante muy limpia, la chica que limpiaba muy atenta, no faltaba de nada. Zona de piscinas muy cuidado, limpio, socorrista muy atento y zona muy tranquila, por poner un pero, en enero la temperatura de la piscina, aunque climatizada, es bastante fría. Amenazamos con volver el próximo año.