La Plaza de la Revolución (Piata Revolutiei) tiene una arquitectura impresionante y una gran importancia cultural, histórica y política. Su nombre original era la Plaza del Palacio y se cambió en 1989, después de la Revolución Rumana, que marcó el final de un régimen comunista de varias décadas. Visita la Plaza de la Revolución en la actualidad para contemplar la fusión de palacios del siglo XIX con edificios de la época socialista, visitar los museos y observar los monumentos conmovedores.
El elemento central de la plaza es el Monumento del Renacimiento, que mide 25 metros (82 ft) de altura. Este monumento es un homenaje a los esfuerzos de quienes lucharon para derrocar al dictador comunista Nicolae Ceausescu. Busca la placa que tiene los nombres de las personas que fallecieron durante la revolución. Dirígete al lado sur de la plaza para ver una estatua del difunto político Iuliu Maniu. Este personaje se opuso al gobierno comunista y murió en prisión después de recibir la sentencia de cadena perpetua con trabajos forzados.
En el lado este de la plaza se encuentra el Palacio del Senado, anteriormente conocido como el Comité Central del Partido Comunista Rumano. Aquí fue donde Ceausescu huyó con su esposa de los ciudadanos que se rebelaron al inicio de la revolución. Observa los elementos cuadrados imponentes y las columnas de estilo griego de la fachada del edificio.
En el lado opuesto hay un palacio neoclásico majestuoso construido entre 1812 y 1820 como residencia real. Actualmente, es la sede del fabuloso Museo Nacional de Arte de Rumania. Sus dos colecciones permanentes incluyen obras de arte rumano y europeo. Observa las obras de Constantin Brancusi, Claude Monet y Rembrandt, entre otros.
La Biblioteca Central de la Universidad es otro lugar de interés impresionante ubicado frente a la orilla norte de la plaza. Frente a este edificio hay una estatua ecuestre de Carlos I, que es una réplica de una estatua creada en 1930 y demolida por los comunistas en 1948.
La Plaza de la Revolución tiene una ubicación céntrica, a menos de 10 minutos a pie de la estación del metro de Universitate. También está a unos pasos del Jardín Cismigiu. Cuando estés aquí, siéntate en una banca y piensa en los eventos importantes que sucedieron en este lugar y cambiaron la historia moderna de Rumania. Visita también el Ateneo Rumano, que es la mejor sala de conciertos de la ciudad y se encuentra en los alrededores.