Cuando hayas acabado de explorar todo lo que Mátala ofrece a sus visitantes (que no es poco), te aconsejamos que intentes ir más allá. Abróchate el cinturón y aprovecha para descubrir las joyas que se esconden en los alrededores. Estas opciones son solo un ejemplo de las visitas que deberías añadir a tu ruta:

• Pon rumbo a Heraklion, que se emplaza a 50 km (31 mi) de Mátala, para darle a tu escapada ese toque divertido que la hará inmejorable, con puntos de interés como Palacio de Knossos.
• A 160 km (99 mi) de Heraklion está Akrotiri, otra ciudad que vale la pena conocer, como te demostrarán algunos de sus reclamos más conocidos, como Playa Roja.
• Como última opción, tienes Monte Licabeto, a unos 340 km (211 mi) de Mátala. Si quieres respirar aire puro, este es tu sitio.