Alejado del bullicio de la ciudad, Caniço I es una experiencia perfecta para vivir en pareja o solo.
El apartamento está iluminado por la luz natural que entra por las grandes puertas de cristal que dan al balcón. El inmenso mar es el fondo del comedor y la sala de estar, lo que no deja lugar a dudas: has elegido el alojamiento adecuado.
La decoración es un equilibrio entre modernidad e intimidad: invita a conversar por la noche y compartir un buen vino, con vista al mar.